La planta más resistente se llama Zamioculcas ZZ
Desde los años noventa la Zamioculcas Zamiifolia ha ido ganando posiciones como planta decorativa de interior. Originaria del continente africano, fueron los ingleses los que decidieron apodarla ZZ por el trabalenguas que supone pronunciar su nombre. Es una de las plantas más resistentes que existen gracias a sus hojas gruesas con textura de cera. De muy sencillo cuidado, por eso se ha popularizado su cultivo. Su principal característica es que puede vivir en lugares con muy poca luz, casi en penumbra. También es una planta de singular belleza que va a su ritmo. No tengas prisa por verla crecer, porque te quedarás ZZ. Será muy raro notar cambios de tamaño en su desarrollo. Sigue leyendo para descubrir todos sus secretos, necesidades y cuidados que debe recibir.
Historia de la ZZ
La planta Zamioculcas Zamiifolia como dijimos procede de África y es muy común en países como Tanzania, Kenia y Sudáfrica. Desde este último país la planta llegó a Europa de la mano de unas enfermeras holandesas. A partir de entonces, el cultivo de ZZ se fue extendiendo progresivamente hasta convertirse en una de las más habituales en decoración vegetal.
Mucho antes de que ocurriese todo eso, a finales del siglo XIX, la ZZ fue catalogada debidamente por los botánicos descubridores de la época. Debe su nombre a otra planta muy diferente aunque con un follaje que, a simple vista, se le parece mucho, la Zamia.
La Zamioculcas Zamifolia es una planta única. No lo decimos por decir. Lo cierto es que es la única especie de la familia Zamioculcas, que grande no es. El extremo opuesto al Ficus, que son más de mil parientes. Sí que tiene ascendencia. Pertenece a la familia de las Aráceas, que es la misma matriz que une a muchas otras plantas decorativas de interior como la Monstera Deliciosa, la Alocasia o los Philodendron.
Curiosidades
Además del nombre ZZ que ya hemos mencionado antes, a esta planta también se la conoce como Planta del Armario o Planta Cuervo. Ambas denominaciones hacen alusión a su capacidad para adaptarse a lugares de sombra, con poca luz natural. De modo que, si estás pensando en esa habitación oscura en la que no logras sacar adelante ningún cultivo, esta es tu planta. De muy fácil cuidado y una superviviente.
Este cultivo de porte estilizado va cambiando el color de sus hojas a medida que se hace mayor. Una planta joven tendrá las hojas verdes, mientras que una planta adulta tornará a morado. Asimismo, como procede de climas extremadamente cálidos, la planta está provista de un sistema de reserva de agua en sus hojas. Si te olvidas de regarla te lo perdonará, está siempre preparada para los periodos de sequía. Puede sobrevivir hasta cuatro o cinco meses sin agua, aunque no es necesario que la sometas a esa prueba.
Muy curioso resulta también su cerebro. No es que la planta piense ni nada parecido, es que le llaman así al tubérculo que desarrolla, porque se parece mucho. Tiene tanta potencia que puede llegar a romper la maceta en la que está plantada. Aunque en interior es difícil que suceda, esta planta puede llegar a dar flor. No te obsesiones con ello, porque tiene escaso valor ornamental. La manera elegante de decir que la flor es fea.
También resultan llamativas sus propiedades curativas. En algunos países como Tanzania se utiliza el jugo de esta planta para tratar algunas dolencias, como la inflamación de oídos e incluso úlceras.
Purificadora de aire
La Zamioculcas o Planta ZZ es uno de los cultivos recomendados para limpiar el ambiente, tal y como se desprende del estudio científico de la NASA sobre plantas purificadoras de aire. Tiene propiedades para neutralizar las sustancias tóxicas y contribuir a generar ambientes saludables. En una habitación cerrada es capaz de contrarrestar algunas sustancias nocivas como el xileno, el tolueno y el benceno.
Fiona, nuestra Zamioculcas
Nuestra Zamioculcas Zamiifolia se llama Fiona. Es arquitectónica y resistente como la que más, gracias a sus singulares hojas verdes que parecen de cera. Si estás pensando en llevártela a casa, mantenla en un rango de temperatura de entre 15 y 20 grados.
No es una planta tropical, así que no tendrás que pulverizarla. Fiona pasa de la humedad. No necesita mucha luz ni tampoco mucho riego. Lo más aconsejable es proporcionarle agua cuando se sequen los cinco centímetros de la capa superior de la tierra. Debes vigilar que no le quede agua en el plato de la maceta, porque odia los charcos.
Si estás buscando una planta más grande, debes cambiarla de maceta para que pueda desarrollarse. Lo hará lentamente, pero lo hará, en las condiciones ambientales adecuadas. En cambio, si lo que buscas es una planta pequeña, déjala en el mismo tiesto para acotar los límites. Un consejo extra para que el crecimiento sea uniforme es, de cuando en cuando, ir girando la planta hacia la luz.