El rosal rojo en maceta es un clásico que nunca falla. Es ideal como planta de interior o exterior. Es muy compacta y adaptable a cualquier casa o apartamento sin importar cuál es su tamaño, una característica del Rosal mini o Pitimíni. Te aconsejamos combinar tu Rosal con una maceta de terracota ya que le ayudará a mantener la temperatura adecuada de las raíces y este tipo de maceta absorbe el exceso de humedad del sustrato. De este modo, evitar que las raíces se pudran por exceso de riego. El Rosal necesita estar en un sitio bien soleado. En cuanto al riego, te aconsejamos de regar tu rosal cada 3 días en invierno y casi cada día en verano, sin mojar las hojas ni flores porque podrían salirle hongos si contactan con el agua. Otro consejo importante para que tu rosal esté contento es que lo podes y quites las hojas en mal estado o flores marchitas. Con una buena iluminación y los cuidados necesarios, podrás disfrutar de tu rosal todo el año.